09/11/2017.- Las localidades vallisoletanas de Tudela de Duero, Nava del Rey, Arroyo de la Encomienda y Peñafiel acogerán durante este mes de noviembre la proyección de El ciudadano ilustre, filme argentino dirigido por Gastón Duprat y Mariano Cohn que se alzó con la Espiga de Plata de la Seminci en su edición de 2016. Este ciclo de proyecciones es fruto del acuerdo de colaboración entre la cita cinematográfica y la Diputación de Valladolid, encaminado a desarrollar actos vinculados al Festival en los municipios de la provincia. Dicho acuerdo incluye, además, otras cláusulas, como la cesión del Teatro Zorrilla como escenario para proyecciones y otras actividades incluidas en la programación de Seminci y el apoyo económico de la institución.
Así, en el Auditorio Municipal de Tudela de Duero podrá verse este viernes, día 10, a las 20.00 horas. En Nava del Rey se proyectará el sábado, día 11, a las 19.00 horas, en la Casa de Cultura. Será el próximo viernes 17 cuando la película llegue hasta el Multiusos La Vega de Arroyo de la Encomienda (19.00 horas), mientras que el último de los pases programados tendrá lugar a las 20.00 horas del viernes 24 en el Centro Cultural de Peñafiel. La entrada a todas las proyecciones es gratuita hasta completar aforo.
La Espiga de Plata no fue el único galardón que El ciudadano ilustre logro en la Seminci en 2016, ya que Andrés Duprat se alzó con el Premio ‘Miguel Delibes’ al Mejor Guión. La película, protagonizada por Óscar Martínez, narra la historia de Daniel Mantovani, un escritor argentino consagrado mundialmente tras haber obtenido el Nobel de Literatura que lleva más de tres décadas fuera de su país. Sus novelas se caracterizan por retratar con maestría y despiadada crudeza la vida en Salas, el pequeño pueblo de Argentina en el que nació y al que no ha regresado desde que era un joven con aspiraciones de escritor. Un día, recibe una carta de la municipalidad de dicha localidad en la que le invitan a recibir el máximo reconocimiento de Salas: la distinción de Ciudadano Ilustre. Sorprendentemente, y a pesar de otras obligaciones y compromisos, Mantovani decide aceptar la propuesta y regresar a su pueblo natal. Sin embargo, no será recibido con el cariño y entusiasmo que esperaba.
