Isabel Coixet, recogiendo uno de los premios Goya para ‘La Librería’ © Miguel Córdoba
Partía como una de las grandes favoritas y no defraudó: La Librería, que se estrenó en la 62 Seminci en la jornada inaugural del festival, se alzó en la noche de ayer sábado, 3 de febrero, con el Goya 2018 a Mejor Película. Además, le regaló a Isabel Coixet su segundo cabezón a la Mejor Dirección, galardón que ya consiguiera en 2005 por La vida secreta de las palabras. La realizadora catalana logró también otro Goya que le resultaba familiar: el de Mejor Guión Adaptado, que se llevó a casa en 2003 por mi vida sin mí. La librería, coproducción entre España, Reino Unido y Alemania, es una adaptación de la novela homónima de Penélope Fitzgerald, un libro que, como reconoció durante su visita a Valladolid para presentar la película en Seminci, quiso «sacar adelante» desde que conoció la historia.
Coixet compartió la gala de entrega de los premios que otorga la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas con los protagonistas de La librería, los intérpretes británicos Emily Mortimer y Bill Nighy, que estaban nominados, respectivamente, a Mejor Actriz Protagonista y Mejor Actor de Reparto. Precisamente, fue Nighy quien acompañó a la directora a su paso por el festival vallisoletano, donde aseguró que su papel de Mr. Brundish es «uno de los mejores trabajos actorales» que ha hecho a lo largo de su carrera. Y añadió, además: «Cuando leí el guión, me pareció una adaptación brillante». En la rueda de prensa previa a la proyección de la película en Seminci, Nighy se deshizo en elogios hacia Coixet: «Me ha hecho sentir libre y seguro. Aporta una relación especial con los intérpretes, una relación más íntima y un respeto enorme, y eso es algo que no se puede fingir». Tampoco faltaron a la cita con el festival Jaime Banacolocha y Adolfo Blanco, productores de La Librería, que subieron también ayer al escenario del Madrid Marriott Auditórium Hotel.
Verano 1993 fue otro de los títulos proyectados en la 62 Seminci que anoche se llevó premio en los Goya. En este caso, la película, que formó parte de los ciclos Spanish Cinema y Supernovas, le valió a Carla Simón el premio a Mejor Dirección Novel. Además, David Verdaguer y Bruna Cusí lograron, respectivamente, los galardones a Mejor Actor de Reparto y Mejor Actriz Revelación. Por su parte, Nathalie Poza fue reconocida como Mejor Actriz Protagonista por su papel en No sé decir adiós, ópera prima de Lino Escalera, que también pudo verse en la última edición del festival en el apartado dedicado al cine nacional.
La noche supuso también un nuevo éxito para Los desheredados, de Laura Ferrés, Goya al Mejor Cortometraje Documental. Este trabajo, que se incluyó en la programación de la Sección Oficial en la 62 Seminci, es un retrato del padre de la directora enfrentándose, a los 53 años, al fin del negocio familiar, una empresa de autocares. Ferrés apuntó durante la presentación de Los desheredados en Seminci que en este segundo este cortometraje, el segundo que dirige, «quería lanzar un mensaje, el de un hombre que, pese a todo, mantiene su dignidad». «Es una mezcla entre documental y ficción, me gusta trabajar con elementos reales y abordaros con una puesta en escena más propia de la ficción», comentó también Ferrés, que en este corto ha dirigido no sólo a su padre, Pere, sino también a su abuela, Mari Álvarez. Los desheredados llegó a Seminci y a los Goya con otro importante reconocimiento bajo el brazo: el premio Leica Cine Discovery Prize al Mejor Cortometraje en la Semana de la Crítica del Festival de Cannes.
